
La mañana del domingo se vistió de protesta con la marcha de sectores de izquierda en Santo Domingo, alzando la voz en conmemoración de la Gesta de Abril de 1965 y en rechazo a las concesiones mineras a favor de la compañía Barrick Pueblo Viejo.
Los manifestantes se concentraron en la Plazoleta La Trinitaria para una caminata que se extendió hasta el busto del líder revolucionario Francisco Alberto Caamaño Deñó, en la calle El Conde, exigiendo reivindicaciones a la seguridad social.
Esta protesta fue bautizada como la «Gran Marcha por el Agua, la Vida y la Soberanía», cuyos autores mostraron completo rechazo a la construcción de una presa de colas en la provincia Sánchez Ramírez.
Así se evidencia en críticas lanzadas por Luis Carvajal, señalando que «Caamaño está presente en nuestras altas montañas, velando contra concesiones mineras que interrumpen el curso de las aguas y constituyen una amenaza para la seguridad estratégica de la República Dominicana”.
“Provocación” de los nacionalistas
La convocatoria fue matizada por una manifestación paralela de sectores nacionalistas, ante un bulo que llevó a pregonar que la protesta inicial sería encabezada a favor de haitianos ilegales. Sin embargo, los organizadores desmintieron que este sea su propósito.
Aun con esto, la Dirección General de Migración dispuso presencia de agentes y unidades móviles para evitar la participación de extranjeros en la actividad. Además, fueron desplegados miembros de la Policía Nacional y del Ejército, para impedir que alguno entrara al Altar de la Patria.
Esta seguridad incluyó tanquetas y militares posicionados estratégicamente, lo cual no evitó el desarrollo de la protesta para la que se diseñaron carteles y vestimentas, con la participación de representantes juveniles.

Policías y militares fueron desplegados para evitar que manifestantes llegaran al Altar de la Patria, en el Parque Independencia.
Durante el recorrido, algunos incidentes alteraron la tranquilidad de la jornada. Un grupo de ciudadanos arremetió contra Freddy Gonzalez, miembro de la fundacion Maximiliano Gomez (El Moreno) aunque los motivos no trascendieron de inmediato.
Asimismo, otro participante exhibió un arma blanca de manera desafiante, aumentando la tensión en el ambiente. Además, se reportaron actos de agresión por parte de supuestos manifestantes, quienes rompieron algunas pancartas colocadas a lo largo del trayecto.
Sin embargo, no todo fue desorden. Pese a que las autoridades lanzaron bombas lacrimógenas para intentar dispersar a los participantes, muchos de los manifestantes mantuvieron su curso de manera firme y organizada, reafirmando su compromiso con las causas que motivaron la protesta.
La marcha, enfocada en la defensa del agua como derecho fundamental, la preservación de la vida, la soberanía nacional y la denuncia de desalojos forzosos, reflejó el creciente descontento de sectores de la población frente a políticas que consideran perjudiciales para las comunidades y los recursos naturales del país.