
El papa Francisco simplificó meses antes de su muerte el ritual fúnebre de los pontífices. Lo quería hacer más sencillo y cercano a los fieles católicos
«Ser velado como cualquier hijo de la Iglesia». Ese fue el deseo del papa Francisco y por eso simplificó el año pasado el protocolo de los funerales de los pontífices. Con su muerte este lunes fue puesto en marcha un ritual que él mismo eligió: ya no habrá, por ejemplo, tres ataúdes y el féretro será expuesto sin elevarlo en un catafalco.
Los cambios fueron aprobados por el papa Francisco en abril de 2024 y publicados meses después en el Ordo Exsequiarum Romani Pontificis. «El papa Francisco pidió, como él mismo declaró en varias ocasiones, simplificar y adaptar algunos ritos para que la celebración de las exequias del obispo de Roma expresara mejor la fe de la Iglesia en Cristo resucitado», explicó en ese entonces Vatican News, el medio oficial del Vaticano.
«El rito renovado, además, debía subrayar todavía más que las exequias del romano pontífice son las de un pastor y discípulo de Cristo y no las de un poderoso hombre de este mundo», agregó.
Estos son los cambios y pasos del ritual del funeral pontífice y algunas razones que dio el papa Francisco para las modificaciones que le fueron acordadas. Serán, en concreto, tres ‘estaciones’ que detallamos a continuación.
La primera ‘estación’: la casa del papa Francisco
La constatación de su muerte fue realizada en su capilla privada, en lugar de hacerse en su habitación. El papa murió en su apartamento de la residencia de Santa Marta, precisó el Vaticano.
El cuerpo del papa Francisco fue colocado en un féretro a las 8:00 de la noche (hora local) en esa capilla de su residencia de Santa Marta, en el Vaticano, donde vivía desde su elección, anunció la Santa Sede.
«Esta noche, lunes 21 de abril a las 20:00, su eminencia el muy reverendo cardenal Kevin Joseph Farrell, camarlengo de la Santa Iglesia romana, presidirá el rito de certificación del deceso y la colocación del cuerpo en el féretro», había precisado más temprano la Santa Sede en un comunicado.
Tras la constatación de su fallecimiento en la capilla privada, el cuerpo del papa Francisco fue colocado inmediatamente en un ataúd de zinc, que a su vez fue puesto adentro de un ataúd de madera. Anteriormente era colocado en un ataúd de ciprés, luego en otro de plomo y, finalmente, un tercero de roble u otra madera, de acuerdo con Vatican News.
La segunda ‘estación’: el féretro del papa Francisco irá directamente a la Basílica Vaticana
Anteriormente, el ataúd del papa era llevado primero al Palacio Apostólico, la residencia oficial del pontífice. Pero, con los cambios pedidos por el papa Francisco, su féretro irá directamente a la Basílica Vaticana.
«Se suprimió el primer traslado al Palacio Apostólico. Se han precisado algunos pasajes remodelando la segunda ‘estación’: dado que la deposición en el féretro ya ha tenido lugar tras la constatación de la muerte, el féretro se cierra la víspera de la misa exequial. La segunda estación en la Basílica Vaticana contempla un único traslado a San Pedro, el cierre del féretro y la misa exequial», explica Vatican News.
El Vaticano informó este lunes que el cuerpo del papa Francisco sería trasladado a San Pedro este miércoles.
«El traslado del cuerpo del santo padre a la Basílica Vaticana para que lo honren los fieles podría darse en la mañana de este miércoles, dijo el Vaticano en un breve comunicado. La confirmación de este paso será anunciada este martes, agregó.
Una vez en la basílica, «el cuerpo del papa difunto se expone directamente en el féretro y ya no en un féretro alto. Además, de conformidad con lo que establece el Cæremoniale Episcoporum para las exequias de los obispos diocesanos, durante esta exposición no se colocará el báculo papal junto al féretro», explica Vatican News.
Francisco había explicado en el libro ‘El sucesor’ que hacer dos velatorios le parecía «excesivo», de acuerdo a un reporte de Europa Press. «Que se haga uno solo y con el papa ya en el ataúd, como en todas las familias».
La tercera ‘estación’: el entierro del papa Francisco
Esta etapa del ritual incluye el traslado del féretro al sepulcro y su entierro.
El arzobispo Diego Ravelli, maestro de las celebraciones litúrgicas de los pontífices, había detallado a Vatican News que este paso «ha sufrido una importante racionalización debido a la supresión del depósito y cierre del ataúd de ciprés en un segundo de plomo y un tercero de roble u otra madera».
«Como siempre le prometí a la Virgen, ya está preparado el lugar. Quiero ser enterrado en Santa María Mayor», había dicho el papa Francisco en una entrevista con N+.
Y este lunes se conoció una última petición muy cercana a este lugar. “Deseo que mi último viaje terrenal termine precisamente en este antiguo santuario mariano, donde siempre me detengo a rezar al inicio y al final de cada viaje apostólico, confiando confiadamente mis intenciones a la Madre Inmaculada y dando gracias por su dulce y maternal cuidado”, dice el testamento.
«La tumba debe estar en la tierra, simple, sin decoración particular y con la única inscripción: Franciscus», escribió el papa, que se convertirá en el primero en más de un siglo en ser enterrado en un lugar distinto a la Basílica de San Pedro.